El despacho que ha montado la exalcaldesa de Iruñea y actual presidenta de UPN Cristina Ibarrola en el ayuntamiento de la capital navarra no tiene permisos y se ha hecho sin autorización. Con esta contundencia se manifestó ayer el teniente de alcalde Joxe Abaurrea, quien anunció una revisión del proyecto que ha terminado con la construcción de un despacho de uso exclusivo para Ibarrola dentro de las dependencias del grupo municipal regionalista, donde comparte espacio con los otros ocho ediles de UPN y dos asesores.

“Lo que hemos visto es que el despacho, tal y como se ha realizado, no se corresponde ni con lo que solicitó en su momento UPN ni con lo que se autorizó por parte del área que se dedica a hacer este tipo de reformas”, dijo.

La revisión de la obra, según Abaurrea, busca comprobar si ha existido alguna irregularidad y sobre el coste aseguró que no existe una cifra exacta. Sólo en el acristalamiento del despacho, el gasto alcanza los 16.000 euros, a lo que habría que añadir el de otros materiales utilizados, el mobiliario y las horas de trabajo de los operarios municipales.

EH Bildu comentó que “lo que no vamos a permitir es que haya grupos que mantengan privilegios respecto de otros”. En la misma línea, Txema Mauleón, edil de Contigo-Zurekin, aseguró que “no caben privilegios y tampoco que tanto el PP como Contigo-Zurekin estuviéramos semanas sin siquiera un despacho”.

La construcción del despacho terminó hace varios días. Tiene escritorio, ordenador, una mesa redonda con cuatro sillas y el acristalamiento dispone de vinilos para garantizar la privacidad.

El proyecto comenzó a gestarse cuando Ibarrola todavía era alcaldesa, pero ya era conocedora de la moción de censura, lo que iba a obligar a todos los concejales de UPN a dejar sus despachos en las respectivas áreas y volver a las dependencias del grupo municipal. El nuevo equipo de Gobierno recibió una instancia de UPN para habilitar en su local una sala de reuniones, que ha terminado por ser de uso exclusivo de la exalcaldesa.