La Diputación de Gipuzkoa y la Mancomunidad de Enirio-Aralar, el ente público que conforman quince ayuntamientos de Goierri y Tolosaldea para la gestión de sus tierras en el parque natural de Aralar, se han dado una oportunidad para el entendimiento tras cinco años de bloqueo y relaciones “mínimas” y han anunciado la apertura de un periodo de negociación de tres meses para acordar unas líneas de actuación conjuntas en Aralar para lo que queda de legislatura. De entrada, suscribieron ayer en Ordizia un acuerdo que permitirá invertir 300.000 euros en limpiezas y otras actuaciones urgentes en el parque natural en 2024.
Se pone fin así a un tenso periodo de cinco años en los que las relaciones entre ambas instituciones han sido “mínimas”. “Éramos conscientes de que teníamos que superar esa situación y por eso comenzamos a reunirnos con asiduidad al comienzo de la legislatura”, resumió ayer el diputado de Equilibrio Territorial de Gipuzkoa, Xabier Arruti. El acuerdo, según el diputado, permitirá “mejorar la gestión y los cuidados de Aralar”.
Deterioro de los pastos
El pasado mes de enero, la Diputación de Gipuzkoa ya alertó de la situación en la que se encontraban varias zonas de los pastos de Aralar. En cinco años, desde que se bloquearon las relaciones entre la Diputación y la mancomunidad, la maleza había ganado casi un 20% de espacio en esta sierra, más de 500 hectareas, según mostraban las imágenes aéreas tomadas por el ente foral.
Los y las ganaderas, por su parte, daban por pedida la legislatura, “resignados”, ante la “inacción y dejadez” de la mancomunidad, firme, al menos en apariencia, en su tesis de intervención mínima en el medio natural. Pero el acuerdo de ayer abre una vía para el entendimiento y reactiva la inversión para desbroces y actuaciones urgentes.
La Diputación y los ayuntamientos destinarán 300.000 euros a limpieza de prados y otras actuaciones urgentes este año en Aralar
“No era normal. Vivíamos en una paradoja”, reconocían ayer fuentes de los ganaderos, que asistían la semana pasada a una foto inédita. Mientras ayuntamientos como Abaltzisketa, Amezketa, Ataun y Zaldibia destinaban este mismo año 2024 un total de 90.000 euros para limpieza de montes municipales propios que están dentro del parque natural de Aralar, en las zonas contiguas gestionadas por la mancomunidad (estos municipios también están integrados) se destinaban “cero euros”.
El sindicato agrario Enba hacía circular en redes dos fotos: una de prados limpios en una zona municipal y otra próxima “sucia”, llena de argoma, en terrenos de la mancomunidad. “No permiten hacer en terrenos de la mancomunidad lo que sí hacen en los propios”, lamentan fuentes próximas a los pastores.
La foto de Arruti y Ezenarro ayer supone un antes y un después en una cruenta guerra salpicada de querellas judiciales, sabotajes, incendios y animales de ganaderos muertos por disparo en la frente, entre otros.
Todo ello con el debate sobre las pistas de Aralar de fondo. Un debate sin resolver y con visiones enfrentadas, entre quienes priorizan los accesos a zonas montañosas para los pastores, con el objetivo de favorecer su actividad, y quienes anteponen la conservación del espacio natural y la mínima intervención.
Se dan un plazo de tres meses para acordar las actuaciones a realizar hasta 2027 en tres ejes estratégicos: pistas, desbroces y financiación
También hay que subrayar que la guerra de Aralar tiene otro componente político y explotó en 2019, cuando las elecciones municipales y forales de 2019 dieron pie a un gobierno del PNV en la Diputación y una mayoría de ayuntamientos de EH Bildu en los quince municipios que integran la mancomunidad: Ordizia (presidencia), Beasain, Lazkao, Altzaga, Arama, Ataun, Gaintza, Amezketa, Abaltzisketa, Orendain, Zaldibia, Itsasondo, Legorreta, Ikaztegieta y Baliarrain.
Arruti dijo ayer que en los tres próximos meses de negociación habrá tres ejes estratégicos. El de ampliar los desbroces, incluso el modelo de financiación, citados ambos por el diputado, parecen asuntos menores en comparación con el tercer punto a debatir: el de las pistas.
Pero el acuerdo inicial es un hecho. Y también lo es que las partes se han emplazado a negociar las actuaciones a llevar a cabo durante la legislatura, lo que hace presumir que ya existe un acuerdo de base que permite un mínimo entendimiento y evite otro bloqueo.
Sin los pastores
Pero en la foto faltaban el colectivo de pastores y ganaderos de Aralar, que mantiene la ruptura de relaciones con la mancomunidad desde marzo de 2021 y sigue sin canales de comunicación activos con la administración mancomunada. Fuentes próximas a los ganaderos aseguran que el acuerdo es “valorado”, pero lamentan que se haya apartado del proceso a los pastores.
Xabier Arruti, diputado de Equilibrio Territorial Verde de la Diputación Foral de Gipuzkoa y Adur Ezenarro, presidente de la Mancomunidad de Enirio Aralar y alcalde de Ordizia, fueron los que formalizaron este acuerdo en ayuntamiento de Ordizia.
"Éramos conscientes de que teníamos que superar esta situación"
El documento refrendado por ambas instituciones fija las acciones a desarrollar durante este año en lo que respecta a la mejora de los pastos, bosques y otros hábitats, las acciones de sensibilización, la restauración y construcción de chabolas, el arreglo de pistas deterioradas y la mejora de otras infraestructuras de la zona.
"Reglas de juego" con "honestidad"
Arruti dijo que el objetivo es llegar a “pactos firmes” que “garanticen y fijen las mejoras a llevar a cabo en la zona” durante los próximos tres años: “Es algo que debemos a los pastores de Aralar y a la sociedad en su conjunto”. El diputado subrayó que ambas partes están dialogando con “total honestidad” y confía en lograr más acuerdos en los próximos años: “Hemos definido unas reglas de juego, un itinerario de negociación para los próximos meses”.
Para acometer estos trabajos la Mancomunidad de Enirio-Aralar y la Diputación Foral de Gipuzkoa esperan invertir unos 300.000 euros. En el caso de la Institución Foral se destinarán 211.000 euros del programa Goilarre orientado al desarrollo de mejoras en los pastos de los montes públicos del Territorio Histórico de Gipuzkoa. Por su parte la Mancomunidad de Enirio Aralar, empleará una partida de 85.000 para el desempeño de dichos trabajos.
“Estímulo” para la mancomunidad
Adur Ezenarro, presidente de la Mancomunidad de Enirio-Aralar aseguró que este acuerdo es “un “estímulo para seguir dando pasos esa dirección” y agradeció el “compromiso económico que los 15 municipios que formamos la Mancomunidad han ido asumiendo en la anterior legislatura, incrementando año tras año las aportaciones para las inversiones, y tomando la decisión firme de compartir esa responsabilidad con la Diputación."
Ezenarro recordó que la firma de este acuerdo se llevará a la Junta Rectora de la Mancomunidad de Enirio Aralar y, siguiendo con la dinámica del programa Goilarre de la Diputación Foral de Gipuzkoa, se compartirá con los ganaderos.
Por su parte, los ganaderos y colectivos agrarios prefieren ser prudentes hasta saber “qué se ha acordado y qué perspectivas hay”. “Sabíamos que se estaban reuniendo, pero no sabíamos qué están acordando”, admiten. Su relación con la mancomunidad sigue rota.
